En sentido general, es el acto de crear y poner en circulación papel moneda, acciones, obligaciones, letras de cambio, cheques, pagarés u otros títulos valores o de crédito. En el ámbito asegurador y desde una perspectiva contractual, recibe este nombre el acto de formalizar una póliza o contrato de seguro, que constituye la operación básica y fundamental en torno a la cual gira y se desarrolla la actividad aseguradora. Toda emisión de póliza produce a su vez la de un primer y, generalmente, sucesivos recibos, que sumados a los de las demás pólizas y referidos al periodo que corresponda, constituyen la emisión total de dicho periodo.
Así, desde un punto de vista económico-contable, se entiende por emisión el volumen de negocio de una entidad aseguradora, constituido por el conjunto global de primas que genera la misma, al llevarse a cabo la puesta en circulación de los recibos correspondientes a las pólizas formalizadas.
Esta última dimensión de la emisión, como masa de operaciones, es la que tiene mayor importancia general ya que proporciona una serie de magnitudes de gran trascendencia y utilidad para poder analizar el comportamiento y evolución del negocio asegurador, referidos a un plazo de tiempo determinado que, generalmente, coincide con el ejercicio económico.
Entre tales magnitudes hay que hacer referencia a los siguientes conceptos de emisión:
- Emisión bruta de primas (gross premium issues). Corresponde a la totalidad de las primas comerciales o de tarifa emitidas.
- Emisión de cartera (portfolio issue). Se refiere a la efectuada en un periodo a causa de la renovación de contratos emitidos en periodos anteriores.
- Emisión fija (long term portfolio issue). Comprende, en cada periodo, las pólizas de nueva producción susceptibles de ser renovadas en anualidades siguientes, así como las de cartera que, habiendo sido renovadas en dicho periodo, también lo serán en los futuros.
- Emisión de nueva producción (new business issue). Es la relativa a los nuevos contratos emitidos en el periodo de que se trate.
- Emisión de primas neta de anulaciones (premium issues net of cancellations). Se obtiene al deducir de la emisión bruta todas las anulaciones que se han producido en el periodo económico que corresponda, con independencia de que pertenezcan a emisiones de dicho periodo u otros anteriores.
- Emisión de primas neta de sus anulaciones (premium issues net of its cancellations). Se halla al deducir de la emisión bruta del periodo, las anulaciones que corresponde a la emisión de dicho periodo.
- Emisión de recibos neta de extornos (receipt issues net of returned premium). Surge al deducirse de la anterior los importes de primas devueltos a los asegurados.
- Emisión de recibos total (total receipts issued). Comprende el importe global de los recibos emitidos, antes de aplicar deducción alguna por ningún concepto.
- Emisión temporal (short-term issues). Es la de nueva producción correspondiente a contratos que se consumen en el periodo en que se emiten y no constituyen «cartera» en el siguiente por no renovarse la póliza.
La clasificación antes citada tiene el carácter de fundamental y abierta, ya que la misma puede ser incrementada con otras magnitudes referentes a la emisión, que surgirán adaptadas a la finalidad que se pretenda con el análisis de las mismas (así cabría hablar de emisión por modalidades de seguro, por ramos, referida a periodos plurianuales, ajustada o no a los procesos inflacionarios, procedente de nuevos contratos o de incremento de tarifas, etc.).
Dentro de dicha clasificación, reviste en España especial importancia el concepto de emisión de «primas y recargos netos de anulaciones», ya que este es el que legalmente puede considerarse como ingreso técnico en la Cuenta de Resultados. Véase anulación, cartera de seguros, extorno, nueva producción, prima y recibo.