Periferia versus concentración urbana
En detrimento del modelo mediterráneo, más concentrado, la importación del estilo de vida americano que mueve a la población a vivir en zonas residenciales, invertir más tiempo en sus desplazamientos y utilizar más los medios de transporte privados, ha supuesto un elevado crecimiento de la circulación.
Este artículo trata de evaluar empíricamente los efectos de este nuevo modelo urbano, a lo largo de la década 2003 y 2013, con la ayuda de datos estadísticos.
La investigación revela que existe una correlación positiva entre el nivel de desarrollo urbano y las necesidades de las políticas de seguridad vial de las ciudades. En particular, en el caso de las ciudades de provincias españolas, cuanto mas extensa es la urbe, de mayor gravedad son los accidentes de tráfico que se producen en ella. También se ha encontrado una correlación negativa entre mayor densidad de población y accidentes mortales.
A la vista de los resultados obtenidos, se puede concluir que la dispersión urbana es un factor de riesgo en el caso de accidentes graves. Dado que el volumen de desplazamientos y su distancia no se pueden evitar en las grandes extensiones urbanas, la planificación del transporte y la gestión de este riesgo pasa a ser una cuestión de salud pública.
Desde una perspectiva de seguridad vial, sería deseable incentivar la concentración urbana antes que el modelo de periferia que ha predominado en las ultimas décadas en las ciudades españolas.