Distracciones y fatiga
100% Atentos a la carretera
La mayoría de los conductores creemos estar suficientemente concienciados de los riesgos que suponen el alcohol, las drogas, la velocidad y el no usar los sistemas de protección a la hora de conducir, pero no somos tan conscientes de las situaciones de peligro que se generan por distracciones al volante.
Las distracciones son la causa de más del 30% de accidentes de tráfico y por ello, cuando nos sentamos al volante de un vehículo, es esencial que el 100% de nuestra atención esté en la carretera.
Conducir exige una concentración completa que debe mantenerse en tres planos:
- visual: la vista en la carretera,
- manual: las manos en el volante y
- cognitivo: la mente en la conducción.
Las distracciones más habituales son las causadas por:
- Los ocupantes del vehículo. Muchas veces, sin querer, los ocupantes del vehículo distraen a los conductores. En el caso de que los ocupantes sean niños, las distracciones son mucho más habituales; 3 de cada 4 conductores que viajan con niños se vuelven o miran por el retrovisor lo que ocurre en el asiento trasero.
- Manipular dispositivos del vehículo. Es importante mantener siempre las dos manos en el volante. Los dispositivos que más distracciones causan son el navegador, el ipod o la radio, aunque también es importante tener en cuenta que fumar o buscar algo en la guantera pueden ser un factor de distracción.
- Hablar y/o enviar mensajes de texto por el teléfono móvil. El teléfono móvil es otro dispositivo tecnológico cuyo uso, mientras se conduce, aumenta considerablemente el riesgo de sufrir un accidente. Es obligatorio el uso de un sistema de manos libres para establecer comunicaciones telefónicas pero aun así se pierde mucha capacidad de concentración. El envío de mensajes de texto por el teléfono móvil multiplica por 23 las posibilidades de accidente ya que implica tres tipos de distracción; visual (mientras los ojos van leyendo la pantalla); cognitiva (la mente está ocupada elaborando el mensaje) y manual (los dedos van tecleando las letras o botones). Olvídate del móvil mientras conduces.
- Los pensamientos y preocupaciones personales ocasionan distracciones frecuentes. Al conducir debemos dejar fuera del vehículo las prisas, el estrés y las preocupaciones personales.
- Apartar la vista de la carretera. La mayoría de los conductores sabemos que es muy fácil distraerse y apartar la vista de la carretera. Es muy habitual pasar ante un accidente, dejando de prestar la atención al tráfico y provocando, a veces, que se produzcan nuevos accidentes. Nunca debes apartar la vista del tráfico y la carretera.
- Consumir bebidas o alimentos. Ya hemos apuntado a la necesidad de que las dos manos vayan en el volante, si bebemos o comemos, una de ellas irá ocupada y por lo tanto el riesgo de accidente aumenta.
Evita las distracciones y concéntrate en la conducción. Queremos que llegues a casa sano y salvo. Únete a OBJETIVO CERO.