El equipamiento del motorista en invierno
Para muchos la llegada del frío y el invierno es sinónimo de dejar la moto aparcada hasta que llegue la primavera. Nosotros te vamos a dar unos consejos para ir perfectamente equipado y que no te veas obligado a transportarte con otro medio.
Hay un dicho en el colectivo motero que viene a decir que “no hay frío en moto sino capa de menos”. Para ser precisos, no tiene por qué. Puedes llevar muchas prendas, pero esto limitará tus movimientos y si no son de calidad, no te protegerán debidamente contra el frío. Lo mejor es llevar poca ropa, pero buena y aislante.
Otras de las premisas que debemos tener presente es sobre la ropa de calle, ya generalmente poco adecuada para la moto. Sin embargo, para el frío es inútil porque no está pensada para la dinámica de la moto y el frío acabará entrando. Además, no cuenta con las protecciones adecuadas en caso de caída.
Qué ropa de moto debo llevar en invierno
A continuación, vamos a ver qué prendas debemos llevar en moto en invierno.
- Ropa térmica: Para el frío extremo, es imprescindible. Se trata de la primera capa que debemos ponernos y puede extenderse por todo el cuerpo. Hay camisetas, leotardos, sotoguantes, sotocasco, cubre-rodillas… Aquí todo vale ya que suelen estar fabricados en tejidos de alta calidad, con costuras planas, antialérgicos y transpirables con diferentes patentes (Windstopper, Coolmax, Thermolite, Nobuk, Spandex…).
- Capas intermedias: Aquí entra en juego tu ropa habitual de calle. Camiseta, camisa, jersey, forro, pantalón… Según tengas más o menos frío y te sientas más o menos cómodo, puedes ponerte las capas que desees. Ten en cuenta tu movilidad con toda la ropa puesta, ya que es una capacidad esencial a la hora de conducir una moto.
- Chaqueta y pantalón: Es esencial ir con ropa destinada para ir en moto por la protección que te aporta frente a una caída. Además, la que está pensada para el invierno cuenta con una tecnología adecuada contra el frío, tanto en los tejidos utilizados como en su propio diseño. En este caso, es preferible optar por la cordura en vez de la ropa de cuero.Las chaquetas y los pantalones suelen incorporar forros internos desmontables y, lógicamente, cuando más larga sea la chaqueta, más protegerá.
Gracias a las posibilidades de ajustes que pueden llevar tanto chaquetas como pantalones, podemos ceñirlos lo máximo posible. De esta manera, evitaremos turbulencias y, al final, evitaremos con mayor eficacia la entrada del frío al interior.
- Guantes y botas: Las manos son seguramente la zona del cuerpo que más sufre el frío en moto. Los guantes de moto de invierno (con o sin doble capa) son más largos con caña larga y cubren hasta el antebrazo. Los pies también sufren y, aunque deben transpirar, las botas elegidas también deben estar preparadas para las bajas temperaturas. Igualmente, deben ser de caña alta para cubrir hasta la mitad de la espinilla.
- Otros accesorios: Hay zonas específicas que son críticas de cara a la protección contra el frío. Por ejemplo, el cuello, donde podemos utilizar un sotocasco completo o parcial para el cuello.
También hay que tener en cuenta la visibilidad. Al tener la pantalla del casco completamente cerrada, nuestra respiración y la diferencia de temperatura producen vaho que nos limita la visibilidad. Para evitarlo, podemos abrir un poco la pantalla, pero entra un frío helador a la cara. Hay varias soluciones como la impregnación del interior de la pantalla con un spray especial, la instalación de un cubrenariz o naricera o bien un pin-lock (acoplado en el interior de la pantalla).
En la propia moto podemos instalar algunos dispositivos que mejorarán nuestras sensaciones contra el frío. Lo primero, una pantalla parabrisas más alta protegerá más contra el viento. También notarás muchísimo la instalación de unas manoplas que cubren perfectamente las manos o una cómoda manta para las piernas y los pies, muy habituales sobre todo en scooter.