Si comes en el trabajo, no corras riesgos

La pandemia por COVID-19 ha afectado a nuestro estilo de vida, en todos sus aspectos. Y aunque las medidas que debemos adoptar para prevenir la enfermedad tienen que ver más por lo general con el distanciamiento social, y las ya conocidas medidas de higiene, también afectan a nuestros hábitos a la hora de alimentarnos.

Comer en el lugar de trabajo es una de las costumbres que más se ha visto afectada. Las dudas sobre si la enfermedad puede transmitirse a través del consumo de alimentos han provocado que muchas empresas hayan establecido restricciones a la hora de permitir a los empleados comer en sus instalaciones, para evitar el riesgo de contagio.

La Organización Mundial de la Salud ha emitido un comunicado en el que se indica que es muy poco probable que la COVID-19 se transmita a través de los alimentos o de los envases de los productos alimenticios. Los coronavirus no pueden multiplicarse en los alimentos, porque necesitan un huésped animal o humano vivo para hacerlo.

El problema no está en el alimento en sí mismo, pero un estudio reciente determinó que la COVID-19 puede mantener su capacidad de contagio sobre ciertas superficies: hasta 72 horas en el plástico y el acero inoxidable, 24 horas en el cartón, o 4 horas en el cobre.

Si vas a comer en el trabajo, ten en cuenta en todo momento que los envases de los alimentos, al igual que otras superficies, pueden alojar al virus y, por lo tanto, ser fuente de transmisión. Algunas medidas higiénicas, similares a las aplicadas en la hostelería y restauración, pueden servirte de ayuda para prevenir la COVID-19:

• Mantén la limpieza de las superficies donde se consumen alimentos. Usa si es posible manteles desechables.
• No compartas envases tales como aceite, vinagre, sal, etc. Deben ser de uso individual o monodosis.
• Extrema las medidas de higiene en el hogar si llevas comida preparada al trabajo, mantén tanto una adecuada higiene personal como de las superficies de elaboración y manipulación de alimentos.
• Respeta las medidas de higiene personal: lavado de manos frecuente, uso de mascarillas todo el tiempo que sea posible, y distanciamiento suficiente mientras comes.
• Además, deberás mantener, como siempre, las medidas de higiene alimentaria necesarias para evitar las toxiinfecciones alimentarias por una mala preparación, transporte, conservación o manipulación de los alimentos.

Si todos colaboramos, podremos mantener unas buenas medidas higiénicas en el trabajo y minimizar el riesgo para nuestra salud. Infórmate. Cuídate.