Forma segura de llevar a niños en biplazas y coches descapotables
La gran mayoría de vehículos que circulan por nuestras carreteras y ciudades tienen más de dos plazas y no son descapotables. Por eso la inmensa mayoría de artículos de que disponemos como fuente de información en Internet incluyen información para los vehículos más usuales, y poca o muy vaga con respecto a los biplazas y coches descapotables.
Hay que decir que los biplaza no tienen por qué ser necesariamente coches deportivos, aunque sean los más conocidos. Utilitarios como un Smart ForTwo, o algunos vehículos mixtos utilizados para reparto, o camiones pequeños, por ejemplo, son biplaza.
Dicho esto, sabemos que por normativa los niños menores de edad y con una estatura de menos de 135 cm deben viajar, obligatoriamente, en los asientos traseros del vehículo en su correspondiente SRI. Las excepciones incluyen el caso de un vehículo biplaza, es decir, el caso de que el vehículo no disponga de plazas traseras.
En esos casos, lógicamente se puede acomodar el SRI del niño al asiento del copiloto, teniendo en cuenta estas precauciones:
- El asiento debe estar orientado en sentido contrario a la marcha siempre que sea posible (como mínimo hasta los 15 meses, lo recomendable es el mayor tiempo posible, incluso hasta los 4 años).
- Si está orientado en sentido contrario a la marcha, hemos de asegurarnos de que podemos desactivar el airbag del acompañante. Si no pudiésemos desactivarlo y el niño utiliza un grupo 0 no podremos llevarlo con nosotros (porque es obligatorio hacerlo si llevamos al niño en sentido contrario a la marcha).
Además, se deben evitar prácticas peligrosas como llevar a los menores sueltos en el coche, en cualquier caso, aunque vayan sujetos o cogidos en brazos, y menos aún compartir el uso del cinturón de seguridad entre un adulto y un niño que viaje sentado sobre él. En ese caso el cinturón no protegerá al adulto y menos al niño, que podría sufrir lesiones mucho más graves al comprimirse su cuerpo entre el adulto y el cinturón en caso de colisión.
Para el caso de coches descapotables no existe nada en cuanto a legislación que nos obligue, tan solo disponemos del sentido común a la hora de proteger a los niños evitando situaciones de riesgo.