Tras estudiar Derecho en París y ejercer como abogado, Henri Matisse (Le Cateau-Cambrésis, Francia, 1869 - Niza, 1954) acudió a las clases de la École des Beaux-Arts de París, formándose con Gustave Moreau. En su primera época se hizo eco del postimpresionismo de artistas como Paul Signac, Paul Cézanne, Paul Gauguin o Vincent van Gogh: colores fuertes, liberados de cualquier función descriptiva. En 1905, su Retrato de una mujer con sombrero, expuesto en el Salon d’Automne, fue motivo de escándalo: la sala fue llamada por el crítico Louis Vauxcelles la cage aux fauves (la jaula de las fieras). Había nacido un nuevo movimiento: el fovismo.

En 1908, Alfred Stieglitz organizó en su galería 291 de Nueva York la primera exposición de Matisse en Estados Unidos. Ese mismo año, el artista dejó recogido su credo artístico en Notes d’un peintre. Después de la Primera Guerra Mundial, su estilo se volvió más sensual y ornamental. En 1941, una intervención quirúrgica que le obligó a permanecer en reposo le permitió incorporar una nueva técnica: empezó a trabajar con recortes de papel de colores que componía con la ayuda de su asistente. En 1952 se inauguró el Musée Matisse en Le Cateau-Cambrésis, a partir de la donación del artista.