Aunque la época de los años sesenta y setenta en Estados Unidos fue un momento económico relativamente próspero, se vivieron también numerosas protestas sociales. Desde comienzos de la década de los sesenta, Garry Winogrand fotografió diferentes acontecimientos sociales y manifestaciones políticas de una manera libre, lejos de las convenciones del fotoperiodismo. La dimensión sociológica de la imagen no le interesaba demasiado y, en ocasiones, fue acusado de preocuparse más por la forma que por la temática. El autor consideraba que la fotografía carece de capacidad para contar historias y negaba también el medio como herramienta de reforma social.

En esta imagen, tomada durante una manifestación por la paz en Central Park, Winogrand fija su atención en un momento, a priori, anodino: un empleado del parque sujeta cuidadosamente contra su pecho una bandera norteamericana doblada. El fotógrafo rechaza la idea del instante decisivo promulgada unos años antes por Henri Cartier-Bresson, pues considera que cualquier momento puede ser importante. Sus fotografías, ajenas a sentimentalismos y predicamentos políticos, muestran la realidad de manera directa, fría y sin retoques, abriendo nuevos caminos a la denominada Street Photography.