© Francis Picabia. VEGAP, Madrid, 2022
CATÁLOGO DE COLECCIONES
A partir de 1909 Francis Picabia hace su entrada en el arte de vanguardia alternando indistintamente fauvismo con cubismo y con una abstracción algo tosca. Una ambivalencia de estilos que se convierte en nota característica de su trayectoria. En 1918, en Lausana, Picabia publicó Poèmes et dessins de la fille née sans mère, que reflejaba su interés por el ámbito de la mecánica, por las máquinas sin objeto y la identificación entre máquina y mujer. A través del impresor y editor Julius Heuberger, entró en contacto con el grupo dadaísta de Zúrich, que proponía la negación total de la razón positivista. Las máquinas de Picabia, inútiles y autosuficientes conectaban con sus ideas. Este enigmático dibujo se suele relacionar con un grupo de obras donde el artista juega con elementos geométricos, distribuidos en el papel de forma simétrica, generando una suerte de emblemas y símbolos de significado oculto.
La forma remite a una grotesca figura femenina, ataviada con un vestido rojo y una falda con flecos. Los círculos sugieren brazos y pechos, y la mancha negra, la cabeza, desproporcionada y muda. Un paisaje esquemático, formado de cielo y césped, le sirve de fondo.