La Casa de la Amistad para Niños con Cáncer apoya a los enfermos y a sus familias en México

Recibir un diagnóstico oncológico trastoca y modifica la dinámica de vida de los niños, niñas y jóvenes que padecen cáncer, así como la de sus familias, la mayoría de su tiempo pasa a estar dedicado a hacerse pruebas médicas, asistir a las consultas y pasar por cirugías y otras circunstancias clínicas. 

Además, muchos de estos pacientes se tienen que desplazar de su comunidad de origen, en algún estado de la República Mexicana, hasta la Ciudad de México para recibir la atención médica necesaria, lo que les hace estar lejos de su familia, escuela y amigos durante periodos que pueden ser días, semanas o incluso meses. 

La Casa de la Amistad para Niños con Cáncer ofrece al paciente y a su cuidador primario, durante toda la experiencia oncológica, apoyo para el acceso a los medicamentos y tratamientos, al estudio y, también, a alojamiento, transporte y alimentación. 

Las personas que se incorporan a esta iniciativa inician un proceso de pertenencia a una comunidad de aprendizaje. Este sentido de comunidad que se desarrolla entre los pacientes oncológicos beneficiarios de este proyecto demuestra que el acompañamiento de otros y el establecimiento de vínculos sólidos con figuras importantes en el interior de la propia comunidad generan un impacto positivo en la calidad de vida de los enfermos.